lunes, 20 de mayo de 2013

El Gran Gatsby. Fuegos artificiales poco profundos

Nueva York años 20. El fin de la Primera Guerra Mundial dio la bienvenida a una nueva era de crecimiento en la que los negocios (sucios o no), Wall Street, el jazz, el alcohol y la vida cultural, florecieron de manera copiosa. 

En medio de esta vorágine, un hombre misterioso e inmensamente rico ofrece en su mansión de Long Island las mejores fiestas de la ciudad. Sin embargo, nadie le conoce, nadie sabe con certeza cuál es su pasado y sobre todo, nadie imagina lo que esconde tras estas presuntuosas celebraciones.
¿Será "El Gran Gatsby" lo que todo el mundo espera? 

Baz Luhrmann pone su reconocible sello a la quinta adaptación cinematográfica de la novela que en 1925 publicó F. Scott Fitzgerald, y lo hace reinterpretando la obra como nunca antes se había visto. El director australiano, quien nos tiene acostumbrados a un cine de autor muy personal, sigue haciendo suyo el mito del amor para convertirlo en romance trágico pero a diferencia de sus anteriores trabajos, sobre todo a los títulos incluidos en su trilogía "The Red Curtain" ("El amor está en el aire", "Romeo y Julieta" y "Moulin Rouge"), en esta ocasión lo hace de manera más extravagante pero menos emocional. 

Y ese es tanto su punto fuerte como su mayor defecto. A nivel visual y musical sigue siendo un referente dentro de este mundillo y sabe como pocos, retratar ese ambiente cabaretero y teatral que tanto nos gusta. De hecho, las mejores escenas de esta historia vienen de la mano de los momentos donde la música es la gran protagonista. En cambio, toda la fuerza que impregna la estética de la película, diluye la verdadera historia que no consigue conmover ni provocar en el espectador todo lo que debería. ¿Dónde ha dejado Luhrmann los llamativos pero a la vez emotivos momentos que vivimos por ejemplo con "Moulin Rouge"?


Un gran acierto es sin embargo la elección del reparto principal. No sabemos si cuando inició el proyecto, en la mente de Luhrmann ya sonaba el nombre del gran protagonista de esta trama, pero lo que sí sabemos, es que esta elección no podía ser mejor. Leonardo Dicaprio se desenvuelve como pez en el agua dentro de este mundo frenético creado por Luhrmann y nos demuestra una vez más, que su capacidad interpretativa es sublime. ¿Cuándo llegará la estatuilla para este polifacético actor?

Por otro lado, Tobey Maguire y Carey Mulligan, aunque no rozan la perfección del actor estadounidense, consiguen interpretar de manera creíble dos personajes complejos cuya aparente inocencia sólo esconde una visión clasista y materialista de todo lo que les rodea. Por cierto, fantástica la escena en la que coinciden por primera vez los tres personajes. 

Es evidente que la intención era buena y que el resultado es muy atractivo y exuberante a nivel visual, pero hubiéramos disfrutado mucho más
si ese toque intimista que caracteriza la obra de Fitzgerald, hubiera tocado más de cerca el desarrollo no sólo de la historia, sino de los personajes que la conforman. No nos encontramos ante uno de los mejores trabajos de Luhrmann, pero su estilo en la dirección asegura una buena dosis de entretenimiento.

Aquí os dejamos el trailer y la ficha técnica:
Dirección: Baz Luhrmann
Guión: Baz Luhrmann, Craig Pearce (Novela: F. Scott Fitzgerald)
Intérpretes: Leonardo DiCaprio, Tobey Maguire, Carey Mulligan, Joel Edgerton, Isla Fisher,Elizabeth Debicki
Duración: 143 min
Año: 2013
País: Australia

No hay comentarios:

Publicar un comentario